Se trata de un dulce que acompaña muy bien a la hora del café y que, incluso, para los más golosos, puede servir de desayuno.
- 1/2 l. aceite girasol
- 1 kg. harina aprox.
- 350 gr. azúcar
- 2 vasos pequeños de anis dulce
- 1/2 vaso pequeño de vino de jerez
- el zumo de una naranja
- gasificante repostería (1 sobre)
Mezclamos el aceite, 250 gr. azúcar, los licores, el zumo y el gasificante. Una vez hecha esta crema, vamos incorporando poco a poco la harina hasta que obtengamos una masa que pueda ser trabajada con las manos. Después, la extendemos con un rodillo sobre una superficie enahrinada y con un molde (puede ser un vaso) vamos haciendo las pastas y las colocamos sobre papel vegetal en la bandeja del horno. Para su cocción ponemos el horno (con calor arriba y abajo) a calentar 15 minutos a unos 180º. Introducimos la bandeja a media altura y horneamos. Estarán hechos cuando adquieran un color tostado. Finalmente, antes de que se enfríen, los bañaremos en azúcar.
Algunos truquillos:
- Podemos variar el baño utilizando azúcar moreno o coco rallado.
- Si queremos darle un sabor más intenso a naranja añadiremos dos vasos de zumo y un poco de ralladura de la piel.
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